Los productos agropecuarios convencionales, aunque han mejorado la productividad, también han dejado un fuerte impacto ambiental, incluyendo la contaminación del suelo y el agua, la pérdida de biodiversidad y riesgos para la salud humana. Ante esta problemática, la formulación de productos agropecuarios ecoamigables y naturales emerge como una solución prometedora. Estos productos ofrecen beneficios clave, como la protección del medio ambiente al reducir la contaminación y mantener la salud de los ecosistemas agrícolas gracias a su biodegradabilidad y baja toxicidad. Además, garantizan la seguridad alimentaria al disminuir los residuos químicos en los alimentos, lo que mejora su calidad y seguridad para los consumidores. Asimismo, contribuyen a promover la salud humana al minimizar los riesgos para los trabajadores agrícolas y las comunidades locales. La adopción de estos productos representa un paso importante hacia una agricultura más sostenible y saludable.